Antes de una charla decisiva con Ancelotti, Odegaard estaba convencido de quedarse
MARCA.COM
Antes de una charla decisiva con Ancelotti, Odegaard estaba convencido de quedarse

Martin estaba seguro de jugar esta temporada en el Madrid, pero todo cambió un día
Odegaard ya está en Londres de vuelta, reiniciando una nueva vida que para nada se imaginaba cuando dejó la City al término de la temporada. Su mensaje de despedida al Arsenal el 3 de julio es la prueba de que el noruego no contemplaba el regreso, al menos en un corto plazo de tiempo.
Porque Odegaard tenía clarísimo que esta temporada la jugaría en el Real Madrid. Ahora, su mensaje a 20 de agosto y ya como jugador del Arsenal deja entrever que no todo ha sido como esperaba. ¿Pero qué pasó para que se diera este volantazo?
Hay que remontarse a finales de julio, cuando antes de un entrenamiento en Valdebebas se produce una charla de Ancelotti con el futbolista. El italiano le pregunta por su pensamiento de cara al curso y le traslada que va a tener mucha competencia. El propio Carletto lo contó en sala de prensa. "A Odegaard le he dicho que hay ocho jugadores en su posición".
Ese diálogo supone el botón de inicio de su marcha. Desde el lado del jugador se interpreta que esa charla es poco menos que una invitación a irse. El futbolista se llenó de dudas.
En vez de escuchar palabras de aliento o confianza, como el clásico 'serás importante', recibió el mensaje contrario. Al menos así lo entendió él y así se lo trasladó a su agente y su padre. Lo que antes tenía tan claro el zurdo, ahora era completamente oscuro. Y tras hablar con el club ambas partes activan su salida.
La versión desde el otro lado es que simplemente Odegaard ve que no va a ser intocable y tira la toalla, optando por un destino donde cuenta con la total confianza de su entrenador, Mikel Arteta.
El Arsenal siempre estuvo atento a su futuro y esperanzado en poder recuperarlo. Lo que en junio era un no rotundo acabó siendo un sí. Martin se había incorporado a la pretemporada en el arranque de la era Ancelotti motivado y esperanzado.
La marcha de Zidane, la fe del club en él, arrancar de inicio sin lesiones... Aunque un esguince a los pocos días de entrenar le lastró, no pudiendo lucirse en los minutos jugados. Sin embargo, tras aquel diálogo se empezó a escribir su epitafio en el Madrid.
En el club se cree que Martin, que ciertamente no lleva nada bien no jugar, y por eso apostó por una salida en enero, esperaba una alfombra roja y poco menos que la titularidad casi asegurada, y que al darse cuenta de que no sería así opta por la marcha.
Desde su lado se niega la mayor y se interpreta aquella charla como la semilla del adiós, un primer toque para desencadenar la caída de todo el dominó, para que el Madrid además ingrese una importante cantidad de dinero. Odegaard espera encontrar por fin en Londres la estabilidad que no ha disfrutado tras años de cesiones.
Ya conoce el club, es una apuesta del entrenador, sabe lo que es la Premier y además le gusta Londres. Allí tratará de confirmar lo que mostró en San Sebastián, que es un jugador de nivel que solo necesita continuidad para acabar de explotar.